Viña las Niñas

Viña las Niñas - Un proyecto de amistad

en 1996 Bernard Dauré se embarcó en un loco proyecto con sus amigos Jean Pierre Cayard y Claude Florensa, un dominio en tierras australes, en Chile. Las esposas de las tres familias (madres e hijas) se enamoraron de las tierras de Apalta, en el Valle de Colchagua, a sólo dos horas al sur de Santiago de Chile, y así nació Viña las Niñas en su honor.

Viña LasNiñas cuenta hoy con 36 hectáreas plantadas en el corazón de Apalta. Cabernet Sauvignon, Carménère, Syrah, Mourvèdre, Merlot y Chardonnay son las variedades que eligieron plantar, ya que estas cepas prosperan y se expresan mejor en el terruño. Mathias Klotz es el responsable del diseño de la bodega y dirige su construcción. Mathias Klotz, gran arquitecto chileno, comprendió enseguida el deseo de las tres familias y de las niñas: una caja de madera, cajas; una bodega, oficinas, un laboratorio, un almacén, una sala para las barricas...
El proyecto ha respetado este gigantesco entorno dominado por los sentidos. La sencillez de los materiales, la transparencia, el equilibrio en la obra. El edificio se mimetiza con el paisaje durante el día, por la noche lo ilumina y se desplaza frente a la planicie de Apalta.

El Valle de Colchagua fue una de las zonas agrícolas más importantes del país. La particular historia de la casona de Viña Las Niñas se remonta a fines del siglo XIX, cuando fue construida para albergar a la familia Bulnes, propietaria de la Hacienda Apalta, dedicada principalmente a la agricultura.

Esta hacienda tuvo varios dueños hasta 1967, cuando fue expropiada por razones políticas y dividida en parcelas más pequeñas.

En el año 2000, la hacienda donde se encuentra Casa Patronal fue adquirida por la empresa Viña Las Niñas, que se encarga de restaurarla y de mantener constantes trabajos de renovación y conservación a su alrededor.

Viticultura ecológica

Las Niñas está cada vez más arraigada en Apalta y desafía la modernidad en los vinos que de ella proceden. La producción ecológica es una obligación, un equilibrio, una búsqueda continua en cada añada. La frescura de los vinos es testigo de la eterna juventud.

Comenzó a producir los primeros vinos ecológicos en 2013 y desde 2017 todos los productos y vinos cuentan con la certificación ecológica Ecocert.

Sostenibilidad

La bodega ecológica ha querido comprometerse de forma duradera con la calidad de vida de sus trabajadores, la comunidad en la que está inserta y el medio ambiente que la rodea, a través de una correcta gestión del viñedo, el suelo y el entorno, un uso consciente del agua, la energía y los combustibles, y una preocupación por la biodiversidad del entorno .
De esta forma, ser sustentable significa representar en cada botella esta fascinante combinación de elementos del Valle de Apalta y crear auténticos vinos orgánicos que representan la tierra, pero con la fineza, elegancia y experiencia que han distinguido a Viña Las Niñas desde sus inicios.

La tierra - Apalta

La tierra de Apalta, "Temblor" en dialecto indígena, es un pequeño valle en forma de herradura protegido al norte, este y oeste por cerros que alcanzan los 600 metros sobre el nivel del mar. Este valle se beneficia del viento entre el Océano Pacífico y los Andes. El río Tinguiririca forma el límite sur de Apalta y regula las temperaturas. También aporta el agua necesaria para el riego. El suelo está formado por arcilla arenosa mezclada con roca volcánica. Las temperaturas registradas en verano alcanzan los 23 grados (de 12 °C a 35 °C). Las Niñas han ido domando esta tierra para producir uvas de alta calidad que nos sirven en la producción de los mejores vinos tintos de Chile. Apalta es hoy una de las regiones vitivinícolas más reconocidas, prestigiosas y premiadas del mundo y desde 2018 cuenta con reconocimiento legal como Denominación de Origen.